Harto de las órdenes que le dan diariamente a cambio de un miserable sueldo, y de ser apuntado y culpado diariamente por las atrocidades que hacen sus colegas de trabajo, este joven quiso salirse de ese cuerpo policial por la puerta grande. Para ser despedido, quería que la gente viera su otra cara.
Al publicar la foto, generó muchas reacciones por parte de sus colegas, y minutos después quitó las fotos, pero ya era tarde porque alguien las copió y las publicaron nuevamente en diferentes redes sociales.
No se sabe a ciencia cierta si el funcionario además buscaba con esto llamar la atención sobre la homofobia que existe dentro de los cuerpos de seguridad, en donde no aceptan personas de géneros homosexuales o lesbianas, y se burlan constantemente de los que descubren haciendo lo que él hace. Seguramente, el próximo paso será entrar en la industria del entretenimiento para adultos.
Fuente: Donlengua.com
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