Las largas filas, que comenzaron a formarse desde comienzos de semana y se acentuaron a mediados, se mantienen igual de inmensas a finales en todas las estaciones donde hay gasolina. Donde no hay, gran cantidad de vehículos permanece en espera a que llegue la cisterna a llenar los tanques del depósito.
Hasta seis horas en cola han tenido que pasar muchos marabinos esta semana expuestos a la inseguridad, para surtir de combustible a su vehículo y algunos hasta se duermen en la espera. “Pasé mala noche, no había dormido nada por los cortes eléctricos. Tuve más de 12 horas sin luz”, dijo José Velázquez, mientras se reincorporaba en el asiento de su carro, enfilado en una cola de la E/S Los Haticos.
Fuente: Panorama.com.ve
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